Prohibido el uso de pick up, el cierre de calles para festejos, las fiestas o eventos de carácter ´público o privado. Preocupa la desobediencia ciudadana y la casi nula capacidad de las autoridades para un control efectivo. Debería existir algún tipo de medida para controlar la venta de licores en espacios dedicados a ello. El distanciamiento recomendado en el transporte público es un mal chiste. Así estamos en Santa Marta.