Una compañía de Danza-Teatro; eCdC (Colegio del Cuerpo de Cartagena) Escena expandida en todas sus posibilidades: Luz, sonido y perfecta sincronización con bailarines que despiertan a nuevas sensaciones corpo-orales y con él las posibilidades del ser integral.
Un homenaje a la gran sacerdotisa del blues NINA SIMONE y al poeta de Martinica AIMÉ CÉSAIRE, uno de los padres del movimiento de «la negritude»
Álvaro Restrepo: La obra surge como un grito de protesta y rebeldía en contra de la discriminación racial en Cartagena, en Colombia y en el mundo.
Clarisa Ruiz
En escena se manejan todos los símbolos de las luchas por los derechos civiles, por violencia racial. Parecen condiciones actuales de discriminación .
El trabajo de eCdC explora en la profundidad de la condición humana de un grupo de una fortaleza excepcional, dueño de una gran alegría y actitud ante la vida que los mantiene vitales, disfrutan su esencia con cómida sana, todo natural y no chocan con el ambiente. Templar el carácter en condiciones adversas se manifiesta en su música vital.
De cómo se asume el descubrir que el color de piel es una difilcultad más en el desarrollo de la raza; la rabia del título está representada en lo gestual de la coreografía que con los movimientos en el escenario imprimen su narrativa propia, la energía del público es lo que hace subir al máximo el clímax del montaje y llega el mensaje: Se despertó la sensibilidad del espectador.
Contrasta con la alegría de la música de la costa, la dureza de las facciones de los bailarines. la danza es un ritual sagrado, sanador y definitivamente liberador. Integra la fuerza interior con el talento innato y a ello se le suma la intensa disciplina de la formación.
Hay una escena íntima donde el cuerpo va tomando forma y ocupa su espacio, es donde nace el movimiento lúdico y la exploración que cada bailarín hace y personifica en su actuación. Y todos al unísono despliegan una estética plástica única que esperamos haber registrado con una representativa muestra fotográfica.
La música de NINA SIMONE es el marco de una historia visual, con el sentimiento del inmenso esfuerzo por superar todas las limitaciones hasta llegar a la escena final en la que se libera el talento creativo de cada bailarín en solitario. Es una suma de energía convertido en pregón liberador.