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El Teatro Cajamag Pepe Vives Campo presenta, en su franja de funciones estelares, a DIEGO TRUJILLO: ¡QUÉ DESGRACIA TAN INFINITA! (STAND UP COMEDY)
Franja: Funciones estelares
Fecha: viernes 24 de noviembre de 2017
Hora: 7:00 p.m.
Función para mayores de 18 años.
¡Qué desgracia tan infinita! Es una burla cáustica de este actor sobre sí mismo, pero a su vez, se convierte en un espejo para quienes sufren los padecimientos propios de los cuarenta.
“Porque el único camino –digno para sortear la crisis de la mediana edad, es reírnos de nosotros mismos y tratar de creer que, de pronto, no todo está perdido”. El descubrimiento de la próstata, la desaceleración del metabolismo o el recuerdo – lejano de la última erección, son algunos de los temas que Diego Trujillo recorre con un punzante sentido del humor. ¡Qué desgracia tan infinita! Aborda con humor negro las distintas situaciones que debe sobrellevar un hombre a las puertas de los cincuenta, tratando de “…echar el tiempo atrás, o por lo menos detenerlo, antes del último y definitivo estertor de la juventud”.
Diego Trujillo es un actor y comediante bogotano, nació el 30 de julio de 1960. Entre 1992 y 2016 realizó en total 24 papeles en televisión. Algunos de ellos tienen gran recordación dentro del público, como los que hizo en Por qué diablos, El Fiscal o Todos quieren con Marilyn. Cada uno de ellos le valió una nominación a los premios TV y Novelas del año correspondiente. Con el personaje de “Antonio Santamaría”, en Pobre Pablo, obtuvo un Premio India Catalina a mejor actor de reparto, en el año 2000. Pero, sin duda, el personaje de “Emilio Iriarte” en Los Reyes ha sido uno de los que mayores satisfacciones le ha brindado. No solo porque el público lo recuerda con gran cariño, sino también porque le permitió realizar un interesante ejercicio de actuación y lo llevó a obtener el Premio India Catalina como mejor actor protagónico, en 2005.
Entrevista a Diego Trujillo
En cuanto a personalidad, ¿cómo se describiría?
Yo soy una persona introvertida, soy una persona tímida, pero también tengo muy buen sentido del humor, de modo creo que combino esas dos facetas de ser muy reservado y de necesitar espacios para mí, me gusta estar solo, pero también me gusta compartir con mis amigos y me gusta la fiesta, no digamos que abierta y la parranda gigante, sino un poco más reservada.
¿Cuál ha sido el personaje que más le ha gustado interpretar? ¿Por qué?
Creo que hay dos muy importantes en mi carrera: uno de ellos que me encantó interpretar fue el italiano en ‘La costeña y el cachaco’, porque asumí el papel como propio, era un hippie italiano, que tenía un bar, era mujeriego, estaba lleno de novias, entonces se la pasaba con las novias tirado en una hamaca en la playa, bebiendo ron, y yo realmente me apropié de ese personaje, me encantó. Y luego el personaje de Emilio Iriarte en ‘Los Reyes’, porque además las grabaciones eran muy divertidas con todo ese elenco de locos con el que me tocó compartir y claro, el resultado y la forma como marcó ese personaje fue muy importante en mi carrera.
¿Cuántos premios ha recibido en su carrera actoral?
Bueno, nunca he hecho la cuenta, realmente, pero digamos, que así por encima, tengo un Premio Simón Bolívar, tengo unos tres Tv y Novela y tengo como cuatro India Catalina.
¿De qué trata ¡Qué desgracia tan infinita!?
¡Qué desgracia tan infinita! Es un monólogo que habla sobre la crisis de la mitad de la vida de los hombres. Es un recorrido por todos los padecimientos que sufrimos los hombres durante esta época crítica de la vida y, sobre todo, es una manera de burlarme de los hombres que no aceptan el paso del tiempo y que no aceptan envejecer, que hacen toda clase de estupideces para tratar de sentirse jovencitos cuando, en realidad, se convierten en unos viejos patéticos. Eso es, es una manera muy divertida de mirar una época crucial de la vida de los hombres.
¿Qué lo inspiró a escribirla?
Era una época en la que yo estaba entrando a los 40’s, hace ya diez años y, por supuesto, era una reflexión sobre lo que pasaba en mi vida, pero también las ganas y la necesidad de imponerme el reto de escribir un monólogo de humor y ponerlo a prueba delante del público.
¿Por qué stand up comedy y no otro género del teatro?
En realidad, me gusta el teatro, en general, yo siempre he hecho teatro, mi carrera empezó con teatro, pero hacer Stand up comedy y hace run monólogo de humor, en realidad, era un reto; era una época en la que los comediantes estaban empezando a hacer Stand up y a mí me parecía fascinante el género, así que decidí imponerme ese reto: escribir un monólogo y ponerlo a prueba y, para suerte mía, funcionó.
Después de su extensa carrera como actor de televisión y cine, ¿cómo ha sido la aceptación del público en esta nueva faceta?
Para suerte mía, ha sido realmente exitosa. Ya tengo cuatro obras escritas por mí, con las que he estado recorriendo todo el país, haciendo temporadas en varias ciudades. De hecho, estuve en Santa Marta con otra de mis obras: ‘El arte de compartir la tusa’, y el resultado fue maravilloso.
¿Cómo alterna el teatro con las demás artes escénicas a las que se dedica?
Realmente no es tan fácil alternarlas, lo que pasa es que la televisión, últimamente, está pasando por una especie de crisis, y por consiguiente he estado alejado de la televisión y más dedicado al teatro. Llevo, más o menos, dos años haciendo exclusivamente teatro. Cuando se presentan las dos, pues generalmente me encargo de que los productores de televisión me acepten mis tiempos de teatro.
¿Cuánto tiempo lleva desde la primera vez que presentó ¡Qué desgracia tan infinita!?
Llevo ya cerca de diez años desde la primera función.
¿Cuántas funciones ha tenido ¡Qué desgracia tan infinita!?
Nunca he hecho la cuenta, la perdí ya. Pero, con seguridad, que han sido muchas más de cien.
¿Qué países y ciudades ha recorrido con este show?
He estado en Guayaquil, Lima, Panamá, Miami y, recientemente, estuve en Ciudad de México.
¿La pieza se mantiene estable o a medida que va presentándola va modificándole algunas cosas?
No, la pieza, necesariamente, va cambiando. No solo porque el actor va envejeciendo, y entonces ya no puede hablar de los 40’s, sino que ahora tiene que hablar de los 50’s. además porque hay temas que entran en desuso, que no funcionan igual de bien que hace diez años. Digamos que todo este tema de violencia contra la mujer y el tema de género, pues me ha hecho recapacitar sobre una gran cantidad de chistes y apuntes que tenía y modificarlos para que entren en esta nueva época por la que estamos pasado y viviendo.
Con respecto a su presentación el próximo viernes 24 de noviembre en el Teatro Cajamag Pepe vives Campo, ¿qué expectativas tiene de volver a presentarse en Santa Marta, ahora con otro show?
Tengo las mejores expectativas porque, primero, adoro a Santa Marta, paso muchísimo tiempo allá; sinceramente me encanta. Me encanta su gente y, bueno, porque tuve un resultado maravilloso con la obra que llevamos anteriormente, de modo que yo sé que la acogida de los samarios va a ser, otra vez, total con esta presentación. Y sé, además, que se van a reír muchísimo.
¿Qué proyectos tiene actualmente y a futuro?
Desde hace ya algún tiempo yo vengo escribiendo muchísimo. Tengo más proyectos para teatro, tengo un largometraje que terminé recientemente y que ahora entra en proceso de revisiones y de, seguramente, prepararlo para que entre a las convocatorias el año entrante y, por supuesto, el sueño es convertirlo en una película. También estoy trabajando en una serie web, y bueno, ahí me mantengo escribiendo proyectos.
Invitación para que los afiliados a la Caja de Compensación Familiar del Magdalena y al público samario, en general, a que asistan a su show y se diviertan el próximo viernes 24 de noviembre.
¡Hola a todos en Santa Marta, les habla Diego Trujillo! Quiero contarles que ya, por fin, este próximo viernes 24 de noviembre estaré presentando mi show ¡Qué desgracia tan infinita!, en el Teatro Cajamag Pepe Vives Campo a las siete de la noche. Así es que ya saben, reserven ya sus entradas, porque es única función y no se pueden perder este show para que se rían y se burlen de mí, ¡allá nos vemos!
Precio de Boletería
Público General: $ 50.000 y $65.000
Subsidios para afiliados
Balcón posterior / Platea posterior:
Cat. A: $22.000 – Cat. B: $26.000 – Cat. C: $37.000 – Cat. D (No afiliado): $50.000
Balcón delantero / Platea delantera:
Cat. A: $34.000 – Cat. B: $40.000 $ – Cat. C: $50.000 – Cat. D (No afiliado): $65.000
La silletería de Platea Preferencial no tiene subsidio.
